domingo, 16 de octubre de 2011

Corazon y pases cortos: Mal de Alturas

Acaba de pasar una nueva fecha del torneo, y gracias a que el 10 de Boca no terminó el match, todavía estamos a 6 puntos de distancia, eso sí, con otro partido menos por jugar y sin encontrar el rumbo para poder aspirar seriamente a ganar el título. Y el mal de alturas que "afectó" a Teófilo (confuso episodio si los hay, teniendo 36 horas para recuperarse ni siquiera estuvo disponible en el banco de suplentes...) ataca los tres frentes del club:


Los jugadores parecen no estar a la altura de las circunstancias. No solo por el bajo nivel de juego que muestran, sino por la actitud de equipo que no pueden disimular. Fastidio, roces, bajas, insultos dentro del campo (el peor ejemplo es el capitán, quien no puede actuar de esa forma, no va Yacob eso). Un equipo que corre (mal) todo el partido no necesariamente es solidario, ni dentro ni fuera de la cancha.


El cuerpo técnico parece no estar a la altura de las circunstancias. No se ve una comunión con los jugadores, el mensaje no llega, los rumores avanzan y los resultados no aparecen. Encima de todo esto, los antecedentes de manejo de grupo y vestuario no lo favorecen al DT, alcanza hacer un poco de memoria y los casos saltan solos.


La dirigencia parece no estar a la altura de las circunstancias. A meses de las elecciones, se enfrascaron en una lucha de poder, a ver quien la tiene mas larga, fracturando la agrupación que los llevó a gobernar y dejando un mar de dudas por lo que vendrá (futuro inmediato y mediato). Poniendo a los hombres delante de la Institución están haciendo olvidar todo lo bueno que realizaron hasta hace un tiempo.


En el medio hubo un partido. Donde a pesar de salir a buscarlo, jamás se tuvo la clara posibilidad de ganarlo (y hasta se lo pudo haber perdido de no estar Saja en el arco). El problema es siempre el mismo. Gio (que sigue muy bajo) no puede ganar el partido él solo, pero la ecuación es sencilla, el rival le pone 3 a marcarlo y listo. Y pasa esto porque al lado del 10 juegan Luguercio y Viola, a los cuales el contrario puede dejarlos sin marca, si solitos se encargan de enredarse los pies. Partiendo de ahí, todo empieza a tener un significado. Si le sumamos que el único que puede hacer un gol (Hauche), se la pasa corriendo rivales todo el partido... pobre Hauche...no se le puede pedir mucho mas.


La única forma (cada vez mas remota) de que esto cambie es unir fuerzas, dejar las miserias a un costado hasta diciembre, recuperar a Toranzo (me hacen reír los que lo putean en la cancha, desgarrado hace mas que Luguercio) y a Castro, y esperar el milagro de que los dos colombianos se enciendan y marquen la diferencia que todos antes de empezar esperábamos. Es eso, o luchar por terminar invictos, pero en mitad de tabla. En el post anterior lo remarqué, ahora se sabrá para que estamos, ya dejamos pasar una fecha, el margen se terminó.


Gastón Sampietro.-

1 comentario:

  1. Muy buena nota, y estoy muy de acuerdo en tu punto de vista. De todas formas no en un %100, Si bien es verdad que el único creador de juego en estos momentos es gio moreno, creo yo que la responsabilidad de los resultados pasa mas por el cuerpo técnico que por los jugadores en la individualidad.
    A veces me da la sensación de Simeone no tiene un plan B, y que no puede salir de su esquema de juego. Dependemos muchas veces, de ganar partidos con pelotas paradas o de alguna jugada extravagante de algún jugador estrella.

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